Mito y violencia
Antes de Hamlet estuvo Amleth. La leyenda escandinava del joven príncipe que debe vengar a su padre el rey, asesinado por el tío que se queda con el reino y con la madre, en la cual se basó Shakespeare para su archiconocida obra. Es esta leyenda la que retoma este proyecto de Robert Eggers que mantiene la línea estética y de género de sus dos primeros largometrajes: La bruja y El faro. Cuenta la historia de Amleth quien de niño huye cuando su tío asesina a su padre y que, tras criarse con unos fieros guerreros, buscará volver para vengarse. De paso, abre una puerta a varias figuras importantes del cine escandinavo: el escritor islandés Sjón (Bailando en la oscuridad, Lamb) escribe el guion junto con Eggers, y protagonizan Alexander Skarsgård (también productor de la cinta y proveniente de la familia sueca de actores más conocida de Hollywood: su padre fue el villano en la reciente Dune, entre otros papeles, y su hermano es el payaso Pennywise de las nuevas It), el danés Claes Bang (The Square) y hasta la islandesa Björk, además de actores consentidos de Eggers como Anya Taylor-Joy y Willem Dafoe, a quienes se suman Nicole Kidman e Ethan Hawke. Nada menos.

El conjunto es una cinta visualmente notable, a ratos predecible pero también bastante desconcertante en muchos puntos (basta conocer las otras cintas de Eggers para saber que eso es una constante suya). Esto último no es un demérito, sino que hace a la película original y no solo una versión de Hamlet o de El Rey León al estilo de la serie Vikingos. Por el contrario, muchas veces se siente como un estudio antropológico de esa era, a la cual se acerca con apertura y sin querer imponer cánones actuales, más bien nos presenta un mundo pagano pero de profundas creencias religiosas, donde se cree en rituales, espíritus, oráculos, brujos, brujas y demonios. Varias secuencias se detienen en estos aspectos, por otro lado muy bien documentados, que tampoco son del todo necesarios para la trama. La música y la fotografía son excelentes, aunque en servicio de esta visión ya mencionada, a caballo entre la investigación antropológica, la recreación mitológica (esa secuencia de la valquiria) y la abundante, cruda y desenfrenada violencia. Las referencias cinematográficas van desde la rusa Ven y mira hasta Conan y el cine de Lars Von Trier. Una experiencia cinematográfica interesante, mientras uno no espere una película convencional.

(2022) EE.UU.
DIRECCIÓN Robert Eggers
GUION Sjón & Robert Eggers
FOTOGRAFÍA Jarin Blaschke
MÚSICA Robin Carolan & Seb Gainsborough
REPARTO Alexander Skarsgård, Anya Taylor-Joy, Nicole Kidman, Ethan Hawke, Claes Bang, Willem Dafoe, Björk, Gustav Lindh