(TV 2012) EE.UU.
DIRECCIÓN Jay Roach
GUIÓN Danny Strong basado en el libro de Mark Halperin y John Heilemann
MÚSICA Theodore Shapiro
FOTOGRAFÍA Jim Denault
REPARTO Julianne Moore, Ed Harris, Woody Harrelson
Sarah Palin
Los premios Emmys 2012, entregados la semana pasada, han traído muchas sorpresas. Creo que es la primera vez que la categoría de Mejor Miniserie o Película para TV cobra tanta relevancia. Entre las seis nominadas habían grandes actores, buenas historias y varios géneros, desde el terror, histórico, terminando por el político. De este último quiero hablar y la película para TV Game Change de la cadena HBO.
La película pretende retratar lo vivido en el verano de 2008, cuando el candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, John McCain, escoge a Sarah Palin como su binomio para competir contra Barack Obama. A pesar de que todo gira en torno a política, la película toca también el lado humano, el día a día de un político. Sorprende lo objetiva que puede llegar a ser por momentos, pues simplemente cuenta una historia. Es cierto que en ocasiones tanto McCain como Palin quedan mal, pero es más bien por su forma de ser y no pretendiendo hacerlos quedar mal por tramposos o intentando resaltar las maravillas del otro candidato (Obama). Quizás este sea uno de los puntos más fuertes de la película.
Otro de los pilares de este film son las actuaciones. Julianne Moore se convierte y transforma en Sarah Palin, no solo por el trabajo de maquillaje, que es muy bueno, sino también por su voz y sus gestos, resulta impresionante. Otra transformación fantástica es la de Ed Harris en John McCain. Su papel es mucho más secundario que el de Palin, sin embargo, sus intervenciones son muy importantes. Retratan que a pesar de ser del mismo partido transmitían diferentes mensajes, la gente tenía otras percepciones de ellos. Es más, queda claro que “el pueblo” siente empatía por la candidata a vicepresidente y no mucha hacia McCain. Signo claro es la escena final en que todos corean el nombre de Palin.
De la realización poco hay que decir. Es HBO y se puede dar por sentado la calidad en la forma de sus producciones. Mezclar fragmentos reales de diferentes noticieros le da un toque aún más realista a lo que se presenta. La duda que permanece es por qué hacer esta película ahora. Cuatro años más tarde, por qué el caso vuelve a cobrar relevancia. Quizás por la cercanía a las próximas elecciones y que sirva, hasta cierto punto, como ejemplo a los futuros candidatos. Pero no pretende dar respuestas a las decisiones de McCaine en su campaña, ni explicar los fallos, solo presenta a los personajes y te cuenta sus vidas, su lado humano, lo que viven y sufren durante el periodo de elecciones. Es posible que hubiese sido mejor haberla realizado en el 2010, por los diferentes eventos ocurridos hace dos años, pero esa es solo mi opinión. El punto es contar lo ocurrido, que la gente sienta mayor cercanía hacia los políticos y la importancia de la familia en este periodo, y eso sí lo consigue.
Juan Manuel Meneses