(2012) EE.UU., Reino Unido
DIRECCIÓN Josh Trank
GUION Max Landis, Josh Trank
REPARTO Dane DeHann, Alez Russell, Michael B. Jordan
No una más de superheroes
Si comentamos la premisa seguramente nadie se interesaría; jóvenes que adquieren superpoderes de una manera misteriosa e inexplicable. Pero es que estos jóvenes no quieren salvar el mundo, solo quieren lo que todos los jóvenes anhelan al final del día: pasarlo bien. Quizás este sea el principal gancho de este filme.
Y si a eso sumamos actores y actrices atractivos y fiesta, ya se obtiene la atención de la mayoría del público objetivo. Pero su éxito va más allá de las edades, y es que trata temas serios, una crítica social, por ejemplo la enfermedad que padece la madre de uno de estos “superhumanos” y por falta de dinero no puede curarse.
La técnica es otro acierto, además de la historia, y es que la cámara es impresionante. Casi siempre estás viendo a través de la cámara de uno de los jóvenes (Andrew) que lo graba todo. En momentos algunos encuadres pueden marear al espectador, pero definitivamente han intentado ser creativos y en muchas ocasiones lo consiguen.
Otro dato sorprendente es que los actores son relativamente desconocidos, incluso el director Josh Trank es la segunda vez que ejerce este cargo. Se podría decir que es una película que no dejará indiferente a ninguno que la vea, ya sea por los temas de fondo que trata -que por momentos te hacen olvidar que los persoajes tienen superpoderes-, por las actuaciones, o por lo ingeniosos planos que utiliza.
Juan Manuel Meneses